El espectro sonoro que une este compilado es muy amplio, pero siguiendo como hilo conductor la experimentación, la improvisación, la densidad y por supuesto la oscuridad, no puede más que llenar de algarabía y esperanza a quien lo escucha. Espero pronto podamos ver la continuación de este par de CD’s en el mismo formato físico y digital, me encantaría encontrar en las compilaciones venideras, el trabajo de Ángel Sánchez Borges en cualquiera de sus alter-egos. Gracias.